Albendea
tiene un amplio muestrario de artistas, al menos, relativamente hablando, si lo
comparamos con su escasa población, cuyas obras apenas son conocidas entre sus vecinos.
Podemos citar entre ellos a Natividad González, escritora prolífica de versos,
autora además de otras obras en diferentes géneros literarios, a Carmen
Canales, pintora compulsiva y autora de impresionantes muestras pictóricas, a Inmaculada
Pernia, también amante del arte plástica de la pintura, y a Pedro Rubio, otro
gran maestro de este género de las bellas artes, natural de Jaén, pero
Albendense de adopción y de corazón, que igual crea obras de su pueblo
jienense, como de Albendea, población de la que es natural Teresa, su mujer. Pero
en estas líneas queremos destacar a Octavio Viana García, un hombre
polifacético que descubrió sus dotes como artista en sus tiempos de juventud.
Octavio
es natural de Albendea y cuando abandonó los estudios su padre lo puso a
trabajar en la fabricación de yeso, aunque otras veces se dedicaba a recoger leña
por el monte. Su progenitor era dueño de una fábrica de piedra artificial en
Chillarón y participaba en una sociedad de otra fábrica de mármol en Villalba
de la Sierra, en las que trabajó Octavio. Quizás este trabajo con piedras y
rocas fue el que le desató el gusanillo por el arte de la escultura en Octavio,
técnica en la que dio sus primeros pasos.
Octavio
realizó el servicio militar en el cuartel del Goloso (Madrid), en el arma de artillería.
Pero en 1975, ante la oscura marcha de los acontecimientos en el Sáhara español,
fue enviado a esta por entonces colonia española, donde las tropas españolas realizaban
sus últimas operaciones pacificadoras ante la inminente invasión marroquí con
la Marcha Verde. Al finalizar el servicio militar se dedicó al transporte, para
lo que adquirió su propio camión Pegaso, llegando a prosperar y a adquirir un
vehículo pesado de cuatro ejes, aunque tuvo que dejar su pueblo natal de
Albendea para marchar a vivir a la localidad madrileña de Pinto, donde tiene su
domicilio habitual desde 1992.
Allí
ha vivido hasta ahora con su ya fallecida mujer Maricruz, con sus dos hijas,
Nuria y María Esther, y con su hijo Fernando Octavio. Aunque mantiene su vivienda de
Albendea y regresa siempre que puede al pueblo que le vio nacer, pueblo que
siempre lleva en el fondo de su corazón.
En
cuanto a su prolífica obra artística, ésta se ha elaborado sobre diversos
soportes y en diferentes técnicas artísticas. Así ha desarrollado el arte de la
escultura, como ya citamos anteriormente, empleado para ello la piedra
artificial, la piedra franca extraída de Priego, el mármol, la cerámica o bien la
madera para realizar sus tallas. En cuanto a la pintura ha empleado el óleo, la
cera, el acrílico y la acuarela, así como otros diversos materiales en los que
ha confeccionado diversas composiciones y collages que ni siquiera él sabría cómo calificar. Igualmente
ha ensayado la técnica del grabado, tanto en piedra como en metal e incluso en
arcilla.
ABSTRACTO (CERÁMICA)
ABSTRACTO (CERÁMICA)
ALTAR EN PIEDRA FRANCA
SAN CRISTÓBAL (ARCILLA)
Fue
durante el servicio militar cuando comenzó a dar los primeros pasos por el arte
de la escultura. En 1974 recibió el tercer premio por su obra Soldadito con
rodilla en tierra rindiendo armas, para el que utilizó como material la piedra artificial.
Tras
finalizar el Servicio Militar, Octavio descubrió que en sus tiempos de ocio no
le atraía demasiado la idea de ir al bar, ni al fútbol o a los toros, como la
mayoría de los hombres de su entorno, por lo que decidió dedicar su tiempo
libre a desarrollar sus obras de arte. Esta labor siempre la ha realizado con
entusiasmo, sumergido en su mundo de realidad o fantasía, según los casos, para
inspirarse en la composición de sus obras. Siempre ha llevado consigo su blog
de dibujo y su lápiz, en el que poder plasmar inmediatamente, y así no olvidar,
aquello que iba surgiendo en su imaginación.
AUTORRETRATO (RELIEVE EN MÁRMOL)
AUTORRETRATO (PIEDRA ARTIFICIAL)
Aunque
Octavio es un artista autodidacta, pues comenzó a componer sus obras sin haber
recibido ningún tipo de clases o formación artística. Pero más tarde decidió tomar
lecciones de pintura un par de días a la semana en una academia, con lo que así
ha podido ampliar todavía más sus conocimientos.
Ha
realizado grabados cuyos temas sólo existían en su imaginación, así como obras salidas
del fondo de su alma, para lo que se ha inspirado en fantásticas musas habitantes
de su Parnaso particular que le han impulsado a componer sus imaginativas
obras. Pero de igual manera puede considerársele un artista realista, pues gran
parte de sus pinturas están dedicadas al retrato, generalmente imágenes de su familia
o amigos, paisajes urbanos o temas cotidianos de su vida y entorno.
Sus
últimas obras, terminadas recientemente, son un dibujo en carboncillo y un óleo
del Ayuntamiento de Pinto. También ha realizado un grabado con el retrato de un
matrimonio amigo y su mujer y una escultura en mármol con el retrato de otro
amigo.
BODEGÓN (ÓLEO)
BOTIJO DE TORO (ARCILLA)
CAZADOR (PIEDRA BLANCA)
MUJER ASOMÁNDOSE AL BALCÓN (CERA)
MUJER ASEÁNDOSE (CERA)
CERÁMICA ABSTRACTA
Actualmente
está realizando un óleo en el que representa un día de lluvia en cualquier
parte, aunque tiene varios proyectos más en la mente, que de momento prefiere guardar
para sí. Estamos seguros, sin embargo, que dada su prolífica tarea, no tardarán
en pasar de su imaginación al mundo de la realidad, deleitándonos de nuevo con
la admiración de su obra.
En
cuanto a sus obras en oleo sobre lienzo podemos destacar El Tolmo, con el que
hace referencia a este monumento natural de la ciudad encantada. En este óleo
combina el color azul del cielo, que contrasta con el blanco de las nubes y la
nieve y los pardos oscuros de esta extraña roca de la Ciudad Encantada de
Cuenca. Magistral es también la interpretación que hace en Barco sobre
acantilado, otro óleo en el que combina los colores azules del cielo y el mar
con el blanco de las nubes y la espuma de las olas. También hace una genial
interpretación del velamen de la embarcación, con unas pinceladas y líneas bien
ejecutadas, aunque, quizás, la cercanía del acantilado indica que el barco se
encuentra en peligro y pronto a estrellarse con las rocas de la orilla.
MUJER DESNUDA SOBRE PLATO DE CRISTAL
CUERNOS VIKINGOS (MADERA DE NOGAL)
ESPEJO Y HOJAS DE CERÁMICA
FERNANDO OCTAVIO (OLEO)
En
otros oleos representa diferentes bodegones, alguno de ellos con la cerámica de
Priego representada, otros con transparencias tan bien conseguidas que parece
tratarse de objetos de vidrio reales en lugar de pinturas. En conjunto sus
obras muestran siempre una profundidad bien obtenida, como en el Puente de San
Antón de Cuenca, o un perfecto juego de colores y trazados, como en Niña
Fallera o en los retratos de Mari Cruz y de su hijo Fernando Octavio, este último
a caballo.
En
cera ha realizado varias obras, de las que vamos a destacar Mujer asomándose al
balcón y Mujer aseándose, en las que muestra el dominio de esta técnica sin
ningún complejo. Las líneas bien perfiladas y los colores difuminadas, propios
del empleo de esta técnica, se ejecutan por Octavio con total libertad,
mostrando que cualquier técnica artística que se proponga realizar está
plenamente capacitado para ello.
LA SAGRADA FAMILIA (PIEDRA FRANCA)
LAS CASAS COLGADAS (RELIEVE SOBRE ARCILLA)
LEVANTADOR DE PIEDRAS (MADERA DE NOGAL)
CONTADOR GANADOR DE TOUR (MADERA DE NOGAL)
CAZADOR (MADERA DE NOGAL)
En
cuanto a escultura, lo mismo emplea el método aditivo del modelado, como el
sustractivo de la talla, en piedra y en madera, pero siempre logrando figuras
de gran expresividad. Podemos citar una obra en relieve sobre arcilla de las
Casas Colgadas de Cuenca, que destaca por su monocromía y brillo, la
representación en bulto redondo de San Cristóbal, con un contraposto bien
logrado, así como una perfecta interpretación de los pliegues de las vestiduras
del santo, la Sagrada Familia, en este caso en piedra franca, y una
representación de María Esther en arcilla.
MARÍA ESTHER (ARCILLA)
MARÍA ESTHER (ÓLEO)
MARICRUZ (GRAVADO EN MÁRMOL)
MUJER DESNUDA (MADERA DE NOGAL)
NURIA MARÍA (CERA)
En
madera ha representado con gran naturalidad Cuernos vikingos, Cazador con
perro, Levantador de piedra, Contador vencedor del Tour, o Mujer desnuda. Todas
estas obras muestran su gran hacer en esta técnica, su maestría y creatividad,
así como la composición simétrica de sus figuras, perfectamente estructuradas.
Cerámicas
abstractas, piezas de orfebrería o yesos han sido otras modalidades artísticas
que han permitido a Octavio darnos a conocer su saber en el mundo del arte.
MARICRUZ Y BODEGONES (ÓLEO)
PUENTE DE SAN ANTÓN, CUENCA (ÓLEO)
BARCO SOBRE ACANTILADO (ÓLEO)
EL TOLMO, CIUDAD ENCANTADA (ÓLEO)
RELOJ DE CERÁMICA